Allá por el año 2012, por primera vez escuché el
término Asamblea Constituyente (AC) y al relacionarse este con la Constitución
Política, que actualmente entrega legalidad sistema neoliberal en permanentes
crisis, me interesé en el tema y ahora creo que es el único mecanismo legitimo para
lograr la transformación social, que piden a gritos nuestros ciudadanos,
aburridos de tantos abusos y falsas esperanzas.
Vamos por parte, en términos históricos, ninguna de
las tres principales Constituciones (1833, 1925 y 1980) han sido escritas con
la representatividad del pueblo (poder constituyente originario), por el
contrario, fueron redactadas por nuestra querida oligarquía, que responde a sus jefes del norte. Es por ello
que, en la práctica aún no hemos alcanzado la real independencia, ni la autodeterminación.
La libertad no es algo que el capital transnacional
(que hoy se lleva 2/3 de nuestro PIB), nos vaya a regalar, por lo tanto, no
podemos esperar que la “clase política” nos vaya a dar fácilmente la
posibilidad de redactar nuestras propias reglas del juego. Para eso compañeros,
tenemos que luchar sin cansancio y en patota, porque oponente es fuerte y
feroz.
Creo, con mucha humildad, que la AC debería estar
antes que muchas demandas que son necesarias, pero sectoriales, es decir,
demandas y reformas al sistema de pensiones, al código laborar, el sistema de
salud, el sistema educativo, al código de aguas, la protección de nuestro medio
ambiente, la vivienda y el urbanismo, el respeto a minorías, reconocimiento de
los pueblos originarios, entre muchas otras, en un país donde todo es abuso
hacia los ciudadanos, mientras la clase dominante tiene garantizada la libertad
de ganar y ganar plata aunque este drogando al pueblo con su cerveza, vino y
pisco. No quiero decir que la AC es lo único y más importante, lo que quiero
decir, es que si se emprenden estas múltiples reformas que se plantean hoy en
día, vamos a terminar en 20 años y estarán obsoletas las primeras, pero más
importante aún, es que no se podrán hacer profundas reformas porque serian
inconstitucionales, nuestra Constitución ya no nos sirve.
Dice el dicho popular que la unión hace la fuerza,
por esto el “Poder Social Constituyente” está convocando a una Marcha por la AC
para el domingo 23 de Noviembre a las 11:00 hrs desde Plaza Italia hasta el
Parque Almagro, donde habrá un acto cultural y se informará sobre el manifiesto
del “Poder Social Constituyente” que ya tiene unos 250 firmantes. La idea es
que todas las organizaciones y ciudadanos que apoyan diferentes demandas, se
adhieran a la marcha, al manifiesto y ayuden a luchar por escribir participativamente
nuestra nueva Constitución Política, según yo, la madre del cordero.
Que todos los caminos nos lleven a la AC, para
empujar fuerte el proceso constituyente y que la participación ciudadana nos abra
los duros caminos hacia la libertad.
Hernán Ocáriz Díaz
@hiocariz